Una fe que une

17/06/2022 | Por Arguments

Antonio Rojas

Arguments

catequesis

la chispa

">http://www.arguments.es/wp-content/uploads/lachispa/2022/06/Una-fe-que-une-A.jpg"> Fe es la virtud que nos hace sentir el calor del hogar,  mientras cortamos la leña. —Miguel de Cervantes—  John Sidney McCain, nacido en 1936, es un político estadounidense. Senador por Arizona, fue candidato del Partido Republicano de Estados Unidos para las elecciones presidencial de 2008, que perdió frente al demócrata Barack Obama. McCain se graduó en la Academia Naval de Estados Unidos convirtiéndose en aviador naval. Durante la Guerra de Vietnam, casi perdió la vida en el incendio ocurrido en el USS Forrestal en 1967. Posteriormente, durante ese año, mientras estaba en una misión de bombardeo sobre Vietnam del Norte, fue derribado y capturado, sufriendo graves heridas; pasó cinco años como prisionero de guerra. Nos cuenta él mismo que mis verdugos me ataron con cuerdas de tortura y me dejaron solo en una habitación vacía para que sufriera toda la noche. Más tarde, un guardia, con el que yo no había hablado, entró en el lugar y, en silencio, aflojó las cuerdas para aliviar mi dolor. Poco antes de amanecer, adelantándose al retorno de sus camaradas menos humanitarios, el mismo guardia volvió y reajustó las cuerdas. Nunca me dijo una palabra. Meses más tardes, en una mañana de Navidad, yo me encontraba de pie en el patio de la prisión cuando el mismo guardia se acercó y se detuvo un momento cerca de mí. Entonces, con su sandalia, dibujó una cruz en el polvo. Permanecimos en silencio un minuto o dos, venerando la cruz, hasta que el guardia la borró y se alejó. Para mí ?concluye McCain? eso es fe: una fe que une y jamás divide, una fe que tiende puentes sobre abismos insuperables en la humanidad. Es la fe en que todos somos iguales y estamos dotados por nuestro Creador de derechos inalienables a la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad. Es una fe en cuya defensa moriría. Aseguran que el sentido de la auténtica felicidad, y el valor real de una persona, se mide por la fe con que sirve a una causa que excede a sus intereses personales. En América celebran las virtudes del héroe tranquilo, ese hombre sencillo que hace su trabajo lo mejor que sabe sin quejarse ni esperar elogios; ese hombre modesto dispuesto a ayudar siempre y que, por esa disposición, responde sin reservas, no por la fama ni por la recompensa, sino por el amor. Son esas personas humildes que se convierten, sin ellos buscarlo, en un ejemplo para quienes los rodean, mientras pavimentan para el futuro un sendero hacia la rectitud y la libertad, apoyándose en una fe que une.  

Artículos relacionados

Suscríbete a nuestro canal de Telegram


Síguenos en

Arguments