¿O prefieres estar amargada?

23/06/2017 | By Arguments

Antonio Rojas

Arguments

catechesis

">http://www.arguments.es/wp-content/uploads/lachispa/2017/06/Oprefieres-estar-amargada-2-e1498213936217.jpg"> El que no deja de repetir que las cosas van a salir mal, tiene muchas posibilidades de convertirse en profeta. -Isaac Bashevis Singer-            Sophie tuvo una infancia problemática, y muchos de sus pensamientos eran muy negativos. Un día estaba quejándose, como de costumbre, de un dolor de cabeza. Estaba anticipando el progreso del dolor que, por la tarde, probablemente, se convertiría en una migraña que la impediría ir a trabajar. Una amiga escuchó sus quejas y se atrevió a comentarle: ?¿Por qué no te tomas una aspirina, bebes algo caliente y te echas un rato? Deja de aferrarte a lo que no quieres. Comienza a creer que el dolor de cabeza puede desaparecer y espera con impaciencia el maravilloso día que mañana tendrás en el trabajo. ¿O prefieres estar amagada?            A Sophie la impactaron las palabras de su amiga. Siguió su consejo y cuando despertó de la siesta, el dolor de cabeza había desaparecido. Desde ese momento, Sophie empezó a examinarse a sí misma en serio. Se percató de que, a menudo, usaba la enfermedad para atraer la atención, y decidió comenzar a reprogramar su proceso mental. También cada uno de nosotros puede convertirse en dueño de su propio mundo en vez de ser víctima de él, y transformarse en co-creadores superando las dudas, los miedos y la negatividad, e impulsando las soluciones mejores. Ella Wheeler Wilcox, poeta estadounidense, estaba sentada a orillas del East River en Nueva York reflexionando sobre el hecho de que personas procedentes del mismo entorno familiar terminan siendo muy diferentes. Viendo cómo unos veleros navegaban aguas arriba y otros aguas abajo, escribió: Un barco se dirige al este, y otro al oeste, empujados ambos por el mismo viento. Es la disposición de las velas, no las corrientes de aire, lo que nos indica el camino a seguir.  La grandeza de nuestra libertad es que nos permite elegir cómo enfocar cualquier suceso que irrumpe en nuestras vidas. ¿Amar? ¿Odiar? ¿Luchar? ¿Rendirnos? ¿Hundirnos o alzar la vista y avanzar hacia la victoria? Aldous Huxley, escritor británico, asegura que la experiencia no es lo que te sucede, sino lo que tú haces con lo que te sucede.           Cuando gestionamos nuestra mente de manera positiva, somos nosotros mismos quienes decidimos qué senda queremos recorrer, y nos convertimos en dueños de nuestro mundo y nuestro destino y creamos una vida feliz, gozosa y libre. Eso, ¿o preferimos estar amargados?  

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