[:es]http://www.arguments.es/wp-content/uploads/mujer/2020/12/piaorganiza-casa-cosas-tiempo-orden-empleada-del-hogar-mudanzas-anfitrion-1024x683.jpg" alt="" width="670" height="447" /> ">https://www.linkedin.com/in/pia-nieto/">Pía Nieto es organizadora profesional de la casa y autora del “Manual para organizar tu casa”. Miriam Lafuente tiene la oportunidad de entrevistarla de nuevo; en esta ocasión, para pedirle algunos consejos a cerca de la decoración de la casa en Navidad y preguntarle cómo transmitir con ella su verdadero sentido. Esperamos que te sea de ayuda.
Primero recordar qué es la Navidad y porqué nos gusta decorar nuestras casas. En general, para muchas personas es uno de los momentos más significativos del año. Y en especial para los cristianos son unas fechas muy importantes, que recuerdan el Nacimiento de Jesús hace más de 2000 años. Esta costumbre se ha celebrado en familia o en comunidad y siempre en torno a tres ejes: la mesa, el árbol y el portal o el Nacimiento. Y estas son las tres piezas clave de las que os voy a hablar aunque luego podemos añadir algún detalle para la mesa del día de Navidad o por la casa.
Cada año es diferente y dependerá del momento familiar o personal en el que estemos, pero lo que es cierto es que cualquier cosa en un hogar, que nos implique a todos, si queremos que salga bien y sea un éxito, por pequeño que sea, es bueno que esté organizado. En estos momentos, únicos, de pandemia y de confinamiento, vamos a vivir una Navidad con un espíritu creo mucho más solidario; el mismo que logramos demostrar que teníamos dentro, en marzo. Pienso que miraremos con una mirada más sencilla lo nuestro y con otra de más alcance, a los demás. Pero sea lo que fuere, hemos de organizarnos. El punto clave de esta organización va a ser nuestra economía. Por eso hay que pensar muy bien el menú de los días de fiesta para acogernos a buenas ofertas, detallando guarniciones y postres tradicionales que nos gustan a todos y refuerzan nuestros lazos familiares. Todos recordamos los turrones o mazapanes de la abuela... Desde finales de noviembre o principios de diciembre hay que tener la organización lista y poner fecha a los cuatros grandes bloques: los menús, la decoración, los regalos que nos haremos y a nuestros vecinos.
Todo dependerá de las edades, pero hacerles partícipes desde el minuto cero es un verdadero arte. Motivar e ilusionar es clave; los niños aprenden lecciones y tradiciones que les acompañarán toda la vida. Es bueno hacer el plan y contar con ellos en las tareas que más les gusten, aunque sean pequeñas como salir de compras de papelería juntos o a hacer manualidades para el árbol, o pintar el cielo del belén, o los mazapanes, etc. Los más mayores pueden participar en compras y en cocina o en preparar la mesa o decorar la casa. Este año más que nunca es necesario reforzar el espíritu navideño y decorar nuestras casas para que la alegría sea más patente.
Sí, de hecho, es lo primero en el calendario y en la organización. La corona de Adviento se puede hacer con materiales muy diversos, pero hay que simplificar todo lo que podamos. La tenemos que tener preparada para el último domingo de noviembre, ya que cada una de las cuatro velas que la componen simbolizan la espera del mes que falta para Navidad.
Las dos cosas siempre que se pueda, ¡por supuesto! Ambas tienen raíz cristiana y simbolizan la llegada de Jesús a la tierra. Y ya que hablamos de este tema y como organizadora profesional, me gustaría poner el acento en el modo de guardar la decoración de Navidad. Si es posible todo junto, aunque en cajas separadas y bien etiquetadas, para que cada año sea sencillo acceder a ellas y las cosas no se estropeen. Y cuando termine la Navidad, y antes de guardarlas, comprobar que están bien, sin roturas, ni bombillas fundidas, ni figuras sin brazo. Esta parte hay que ponerle nombre y fecha para completar el proceso; de hecho, esto también se enseña a los hijos: terminar hasta el final el trabajo y hacerlo bien.
Cuando ya nos hemos organizado es un momento bonito para dedicarles tiempo e ir contándoles lo que significa cada cosa, porque todo son símbolos o representaciones que significan cosas concretas de la tradición cristiana. La corona de Adviento de tradición pagana, pero que posteriormente los misioneros le dieron otro sentido, por ejemplo, es redonda simbolizando que Dios no tiene principio ni fin, las velas simbolizan la luz que vino a traer al mundo, el lazo rojo, el amor que nos envuelve y la unidad familiar, las piñas y frutos, los regalos que nos tiene preparados, etc.
Así es y tenemos que contar con ese tiempo en nuestra organización y, desde luego, lo mejor es hacerlo entre todos juntos de un tirón. Rematando bien y aprovechando para limpiar el armario donde guardaremos todo y la zona donde hemos puesto el Belén y el Árbol. * Entrevista realizada por Miriam Lafuente.[:]
